jueves, junio 30, 2005

La marcha o Alegre paseo por Reforma o Por fin conocí a Guadalupe Loaeza (pero de qué forma...)

Los antecedentes o Dice mi mamá que siempre sí...
La semana anterior a la marcha traté de convencer a Hrín para ir juntos. Me contestó con cara de fuchi y tonito despectivo que no, que no le latía, que no le veía el caso, que era como un carnaval. "Pues es un carnaval y es muy divertido!!" contesté, no con mucho ánimo porque me parecía que ya habíamos tenido la misma discusión el año anterior. (tal vez Hrín quería que la marcha fuera entre lenchas bigotonas y vestidas maltratadas para que realmente fuera valioso el marchar por nuestros derechos). Comprenderán ustedes mi asombro cuando uno o dos días después me dijo: "Frieend vamos a la marcha!!" Y yo, "cóomo, wey? si no querías ir". "Sí, pero ya Froi me convenció, y nos vamos a ver en su casa y bla, bla, bla... ándale Frieeend!!!" No sé qué palabras o artes habrá usado mi buen amigo Froi (¿algún masajillo?) para convencer al sometimes-decimonónico de Hectorín pero se lo agradezco.
Mañana stress o Desayuno de pelos
Después de hacerlos sufrir un poquito (ahora era yo el que ya no podía ir, jajaja), por fin todo se arregló: 10.30 en casa de Froi para desayunar. Por supuesto que la hora se convirtió en 11.30 (¿por qué será?), cuando Hrín y yo nos encontramos al pie del mosaiqui-edificio donde vive el Froi. Como de costumbre, no recordábamos el número de departamento así que mi amigo se dedicó a tocar en todos los timbres de los 400s. Muchas respuestas erradas, hasta que contestó un viejito que hablaba misteriosamente de forma muy similar a Froi. Sólo repetía: "¿Quién tocaa?, ¿quién tocaa?", mientras nosotros atacados de la risa volvíamos a tocar a ver si podíamos discernir si era el Froi o un impostor (nota para Froi: cambia tu timbre de voz). Por suerte para nosotros, en ese momento llegó Enrique, quien SÍ sabía el número pero no fue necesario tocar, porque ya Froi bajaba semidesnudo a abrirnos (nota 2: ya tramitamos tu ingreso al Club de Osos Mexicanos, Froi).
Mientras nuestro anfitrión se peleaba por teléfono con alguna ejecutiva de Iusacell, nosotros inspeccionábamos el departamento en busca de comida. Pura piña con la invitación a desayunar porque de desayuno, nein. Bajamos a comprar unos huevitos y demás víveres y poco después disfrutábamos de un opíparo desayuno consistente en huevos con jamón, tamalitos de mole, té, pan tostado, cuernitos con chocolate Tía Rosa, frijolitos, tortillas y salsita de lata, amenizado por el stress de Enrique, encarnado en mamá preocupona, angustiado en que si sus amigos iban a llegar allí, que si nos iban a alcanzar allá, que ya era muy tarde, etcétera. Por fin llegaron los amigos y en alegre comitiva nos dirigimos en micro hacia Reforma (todo muy democrático).
Ya allí tuvimos que caminar un buen trecho hasta que de repente comenzamos a escuchar la música. Antes de llegar, Hrín y yo nos prendimos nuestras banderitas gremiales de lentejuelas en el pantalón (por fin las estrenamos!!), que nos trajo Male desde la mismísima Chueca madrileña (mil gracias por el regalito Male, fueron un éxito y muy chuleadas), para llegar con el outfit adecuado a la aglomeración. Vimos carros con música con bailarines (guapos y feos) y strippers, travestis enseñando las tetas, gente disfrazada, miles de locas y demás gremiales. Había de todo, niños bien, niños mal, rancheros, rockers, marinos, soldados, bikers, vestidos de novia, plumas, lentejuelas, miles de disfraces (un mazinger zeta en patines!!, demonios y ángeles, body painting y mucho más) lenchas guapas (pocas), lenchas horribles (muchas), etcétera. Nosotros fuimos caminando a ver qué veíamos hasta que llegamos al Ángel, donde había un escenario con microfonito y todo. Froi me regaló una banderita gremial que añadí al look (nota 3: gracias, Froi!!).
Encuentro en Reforma o Guadalupe y yo o El Friend casi pierde el estilo o Un oso más para mi penosa (y numerosa) colección
Fue allí donde un tipín saludó a Froi. Después de un rato llegó para presentarnos, un tipo güerito y medio sosito a primera impresión, aunque bastante simpático, sin dejar de ser interesante en una segunda mirada. Yo no oía nada con la música a todo volúmen y los gritos del ente en turno al micrófono y por eso no le entendía a lo que me platicaba y a todo le decía que sí. De pronto, volteo y entre la multitud descubro a... Guadalupe Loaeza!! ¡Había cumplido la promesa de su último artículo del Reforma, Todos somos gay: "Allá nos veremos..."!! Comprenderán mi emoción dado que soy su lector asiduo (tengo casi todos sus libros desde que la descubrí en una conferencia que organizó mi hermana en el 93), así que sin pensarlo más me agarré al cuello de Froi gritando: "Weeeey, allí está Guadalupeeee!! Vamos a pedirle su autógrafooo!!" El Froi me volteó a ver con una mirada de "Wey, eres un naco" pero me valió y repetí mi grito. Para esto, el niño con el que platicaba preguntó que decía yo y el Froi penosamente lo repitió. Simplemente dijo "Ah, pues sí, vamos" y dió media vuelta dirigiéndose hacia ella. Yo no acababa de pensar "y este entusiasta de dónde salió?" (están de acuerdo que del dicho al hecho hay mucho trecho), cuando se voltea para decirme: "es mi mamá..." OOOOO-SSSSSSSSOOOOOOOO.... Y pues allá fui, a conocer a Guadalupe muerto de pena. Todavía en mi stress sólo atiné a llegar a contarle la anécdota de cómo había llegado ante ella (más oso aún) y ya no se me ocurrió nada más que decirle, hasta allí llegó mi locuacidad. Ella muy linda y amable, eso sí. Mejor opté por recargarme en un poste que estaba junto e intentar regresar a mi color original mientras trataba de comentar algún punto con Hrín (ay que bueno es contar con un amigo cerca en estos casos, por lo menos uno puede disimular), mientras Froi seguía platicando con el hijo. Después de un rato nos despedimos y comenzamos a caminar dirección al Zócalo.
Viva la diversidad o El mundo cambia con un poco de alcohol
Se unieron más amigos. Muchísima gente pero ya sin música, por lo que después de un buen trecho decidimos regresar a donde estaban los carros con música. Sin embargo, después de ver a unas lenchas muy alegres brindando por la diversidad, pensamos que no nos caería mal un poco de chupe, así que nos dirigimos al Oxxo más cercano a surtirnos. Fila inmensa y ante la aplastante decisión de la mayoría compramos (eww) ron, por supuesto con Coca Cola Light (bueno, Hrín, Froi y yo, los demás la tomaron con manzana [interesante combinación]). Pero ya con chupe en la mano, hasta me supo rica la cuba y, como siempre he dicho, un chupe cambia el mundo. Todo se veía más divertido. Alcanzamos a preparar los alcoholes justo cuando el trailer del Living se unía al parade, con excelente música y pues nos fuimos en esa comitiva. Allí descubrí a un amigo que me dió un bonche de banderitas gremiales con el logo del Living, (gracias Eli!) que repartí entre mi comitiva. Súper a gusto, me sentí contento de participar en mi primera marcha, sólo eché de menos las porras que me habían contado se gritan en estos eventos, como: "¡¡BANQUETERA, ÚNETE, BANQUETERA, ÚNETE!!; ¡¡QUE NO, QUE NO, SÍ QUE SÍ, YA VOLVIMOS A SALIR!!; ¡¡ESE GORDO BIGOTÓN, TAMBIÉN ES MARICÓN!!; ¡¡FOX, ESCUCHA, TU HIJO SE LLAMA LUCHA!!; ¡¡DETRÁS DE LOS BALCONES, TAMBIÉN HAY MARICONES!!; ¡¡EL QUE NO BRINQUE ES BUGA, EL QUE NO BRINQUE ES BUGA!!", etc. Pero ni modo, estábamos en la parte fresa de La Marcha y no se oían dichas consignas...
Me gusto ver las reacciones de la gente a nuestro paso: sonrisas y caras de asombro, exclamaciones de apoyo, unos barrenderos que pasaban en un camión de basura que bailaban al son de la música para nuestro regocijo, visitantes en los turibuses que gritaban con alegría y levantaban pulgares. Ah! y el detalle de la marcha que me conquistó: dos viejitos con baberos de mujer que bailaban y gritaban alegremente a un lado de Reforma. Me imagino que eran pareja, me encantaron.
Tres gremiales en apuros o The end
Todo muy bien, pero yo (como diría Male) me meaba. Igual Enrique. Hasta que gracias a su impecable logística (una vez más confirmó su papel de mamá en excursión pues llevaba agua, tylenol, paraguas y sólo le faltaron los sandwiches de jamón), junto con Hrín tomamos un pequeño desvío hacia un KFC a paso chacha apurada a desahogarnos el stress. Encontramos a Froi que estaba desaparecido y al llegar al Metro Hidalgo yo me despedí pues tenía que llegar a mi casa a las cinco. Le dejé mi banderita gremial a Enrique (la estafeta), me quité la que traía en el pantalón y me dirigí a la Condesa, donde había dejado mi coche.
Cerramos con broche de oro la noche yendo a la White Party de Stereo (mi outfit cero ad hoc, porque fui de negro jajaja), donde bailamos toda la noche. Me la pasé perfecto, espero poder asistir a la marcha del próximo año y esta vez llegar al Zócalo. Invitación abierta a fieles y gentiles...

viernes, junio 24, 2005

La madrastra

La otra vez vi un capítulo de La Madrastra y comprendí por qué es un éxito de la televisión nacional. Me tocó ver cuando el hijito más pequeño de la casa decide que ya es tiempo de independizarse y se va de la casa para vivir con su esposa, con la cual se ha casado poco antes en secreto, a salvo de las intrigas de la villana de la novela. Todo muy bien, despedidas emotivas, me encantó el close up a la villanísima tía (bueno, aunque alguien les debería decir que Jackeline Andere ya no aguanta un close up) con la cara transformada por la ira y con lágrimas de rabia, con su propia voz en off revelando sus malévolos pensamientos al respecto. La despedida con el papá y la tal María muy buena (ojo remi de mi parte). Después descubrí que medio capítulo se fue en despedidas con cada uno de los personajes que vive en la mansión (como ocho, parece vecindad en las Lomas con tanta promiscuidad). Agotamiento mental pero con la esperanza de otra buena escena.

Después la historia transcurrió entre los pobres de la película. Huicho Domínguez viéndole descaradamente las boobs a la naca-muy-buena-sacada-del-table-y-güera-hasta-que-la-farmacia-quiera de la historia (la cual por cierto solo busca casarse con él por su dinero). Gross. Más gross con sus niños viendo desde la ventana. También comprobé la total nulidad de talento actoral de Sergio Mayer en el papel del hijo interesado de Huicho. Cuando pensé que había visto suficiente, corte a la "noche de bodas" del hijito ahora independiente (el cual al otro día ya hasta casa amueblada tenía). Nononono. El tipo, que es un putín super gremial se ve como sobreponiéndose a su propio miedo de besar a la vieja y diciéndole con voz que pretendía ser cachonda: "Ppoor fffiiiinnnn... nuesstra primmera noche junntosss... nuesstra primmera noche commo mmariddo y mujjeer..." La vieja, como ida (yo creo que le dijeron que tenía que poner cara de virgen y como no sabía pues no se le ocurrió otra). Y luego nooooooooooooooo, corte a LA CAMA. EEEWWWW. Se hubiera visto como violación del pobre wey que no podía disimular su asquito, de no haber sido por la cara de ausente de la vieja todo el tiempo. Literalmente viendo el techo, como diciendo a ver a qué horas acaba esta escena... Hasta el close-up a su lagrimita se vió como más de sufrimiento que de placer y/o alegría. Al otro se le ve más alegría en los ojos en sus diálogos con César Évora, by the way...

Cuando todo acabó me sentí aliviado pero nooo aún seguía más. Escena romántica-cachondona entre Victoria Ruffo y César Évora. MÁS EEEWWWW... Los besos apasionados casi hacían mella en la careta blindada de maquillaje de la Ruffo (weeey tiene una carota inmensa, qué barbara, el departamento de maquillaje se ha de surtir por litro). Y luegooo!!! argh la mano del señor acariciando las mega-gordas y mega-blancas piernas de la Madrastra encarnada en furia seductora... Yo no entiendo. No debe ser la edad, porque que yo recuerde las escenas de cama de La Ojos con Osito-Telch en Mirada de Mujer eran bastante aceptables, tiernas e infinitamente más atrevidas. Pero esto fue realmente asqueroso...

Hoy para completar el task me aventé otro capítulo. Descubrí que metieron a Evelyn, la de BB (la cual por cierto fue en mi prepa) y actúa pésimo la pobre. El otrora también galán BB en inverosímil vendedor de flores (díganme dónde está ese puestito). Los patrocinadores de la telenovela, muy acorde con el reparto madurito, son los medicamentos para el alivio de las almorranas. Otra escena romántica de la Ruffo con el Évora donde este le entrega una cajita blanca muy cuquis con un vestido y le dice que se arregle porque esa noche será "sólo para ellos". Si yo tenía la vaga esperanza de ver a María en un vestido impresionante, PELADILLA. Weeey, ¿¿a quién se le ocurre embutir a la ya entrada-en-carnes-tirándole-a-gorda de la Ruffo en un vestido negro FLOREADO??. Nononono, fatal. Ah y luego la escena surrealista cuando él todo galán le dice "bailamos?" y ella cual damisela virgen, "encantada". En menos de que uno pudiera decir Xiloproct, la escena se convirtió en un escenario pseudo-pop estiloSiempre en Domingo con luces, hielo seco y toda la cosa. Yo todavía no acababa de reponerme del shock por el impacto visual de tan mal gusto, cuando de la escalera fue bajando Laura Pausini cantando su single del momento. Al fondo, un pianista. No comments.

Así, les digo que comprendo el éxito de tal refrito. Tiene todos los elementos para ser el hit: argumento cursi y lleno de intrigas, muchísimos personajes con miles de pedos personales entrelazados, resentimiento social, la historia de la cenicienta incrustrado (en este caso una cenicienta madurona y que en vez de revolcarse en cenizas se revolcó en su catre de la cárcel), galanes y galanas plásticos y prefabricados, un montón de personajes pintorescos y muchos de ellos con alguna incapacidad (by the way, me pareció muy bien Patricia Reyes Espíndola en su papel de mudita y me quedé con ganas de ver a Denise y por supuesto a La Tigresa en el papel de La Duquesa) y, para rematar, escenas de cama "atrevidas" de muy mal gusto. Todo esto metido con desfachatez en un guión que tiene como principal premisa que el público está bien pendejo.

En fin, olviden conmigo la triste realidad del país y comenten conmigo su telenovela favorita La Madrastra...

Recuentos

Hace tiempo que no escribo nada aquí y no es por falta de inspiración. Ya son muchas las veces en las que me he sentado frente a esta compu bautizada cursilonamente (no revelaré su apelativo), escrito un título y desistir después de dos párrafos. Y tampoco es que no hayan pasado cosas en mi vida. Será mas bien que me gusta escribir sobre cosas que ya procesé o por lo menos -remitiendome a mi primer post- encontrado la pregunta correcta.

No han faltado las experiencias vitales (ya corté), las anécdotas chistosas (esas nunca faltan en mi vida) ni las noches surrealistas. Ha habido muchos chismecillos too. He aquí que haré un rápido y superficial recuento de algunas de esas cosillas sucedidas pero no contadas.

Parece que mi proceso de terminar, paradójicamente, no ha terminado. Me encuentro nuevamente ante una promesa dada de reconsiderar todo el asunto. Y eso es difícil, pues una vez que uno considera finalizado un asunto, el hecho de reconsiderarlo nuevamente requiere remover toda aquella estructura de hechos tanto factuales, psicológicos y sentimentales que nos llevaron a una decisión. Y también requiere mucha energía y disciplina. En corto, es difícil. Más aún cuando la decisión no te afecta exclusivamente a tí, sino a otra persona también. Pero dentro de todo estoy tranquilo y en paz.

¿Qué decir de la política? La democracia a la mexicana me parece cada vez más un circo de varias pistas, las cuales se multiplican conforme nos acercamos a fechas electorales. Ver las noticias es como ver el resumen de BB o la versión gubernamental de Con Todo, no les parece?

¿Alguna vez les han contado un secreto de esos que SE MUEREN por revelar? A mí me acaba de pasar. Ante aquellos no enterados uno se convierte en un maestro ansioso de compartir su sabiduría con los neófitos y gentiles. ¿Y qué tal esa ansia para comentar el punto en todos sus detalles? Son como cosquillitas en los brazos. Ahora entiendo perfecto a aquel peluquero mitológico que no podía aguantar las ganas de contar el chisme de que el Rey Midas tenía orejas de burro y tuvo que hacer un hoyo en la tierra para gritarlo. Que luego las chismosas cañitas le hayan contado a todo el pueblo ya no era su pedo... Pero no es lo mismo, oye. Uno no puede comentar sabrosamente el punto con la naturaleza... Jajajaja y no, no diré nada.

Ah por cierto, quiero aprovechar para felicitar a mi amiga Azu que se va a Londres becadísima, a mi amiga Arelux que pronto me hará tío, a mi amiga Liz que acaba de ser su cumple y se fue a Chicago al concierto de U2 (gracias por la playerita amiga, ha sido muuy chuleada), a mi amiga Andra que se me va a París y a mi hermanito Lalochis que se va a Alemania. Felicidades a los que (por fin!!) acabaron la carrera: a mi amiga Carito y a Zairuchis que en este momento se encuentra en las Germanias con su adorado Andy. Felicidades a mi amiga Mary por su nuevo cochecito: el pollo!!! (aún espero el remojón, eh?). Felicitaciones a las que se casan: Karlita, Piñis (ya quiero ver el anillo!!!) y mi hermana. Ánimo a las que aún esperan el anillo (ni modo chicas, manicure cada semana). A los que viajan, espero que se acuerden de mí en el shopping, que conste... Gracias a los que me felicitaron el pasado 19 de junio (blush) y felicitaciones a todas las mamás y mamacitas.

Pues eso es todo por lo pronto, ya sólo me queda comentarles que esto de la sequía es duro... Cada vez comprendo más a Hectorín, jajaja. Igual y la solución es entrar a un chat y buscar a alguien aunque aún no me decido de caer a tal nivel. Ya les contaré... Ah! Y gracias a Dios que es viernes... Saludos a todos.